- Nicolaita distinguido, el politólogo recibió homenaje post mortem por parte de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.
Alumno desde la secundaria hasta la licenciatura, catedrático de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Arnaldo Córdova se mostró siempre a favor de una sindicalismo democrático, de una sociedad más libre y justa, afirmó el ex rector y doctor en Historia, Jaime Hernández Díaz, durante el acto póstumo en honor de este distinguido nicolaita.
Con la presencia de Lorenzo Córdova Vianello, consejero presidente del Instituto Nacional Electoral e hijo del homenajeado; el secretario de Gobierno del Estado, Adrián López Solís, y el rector de la Casa de Hidalgo, Medardo Serna González; Hernández Díaz, quien fue alumno y amigo de Arnaldo Córdova, esbozó el paso de este reconocido mexicano estudioso de las Ciencias Sociales por la Universidad Michoacana.
Arnaldo Córdova fue siempre en el aula crítico y destacado. Ganó en sus años como alumno de la licenciatura en Derecho, una de las tres becas que la Universidad podía otorgar a sus alumnos -por la situación económica de la institución- para estudiar en el extranjero, oportunidad que aprovechó para estudiar en la Universidad de Roma, Italia, resaltó el ex rector.
Arnaldo estudió en una epoca interesante en la Casa de Hidalgo -destacó Hernández Díaz- en ella se debatía y discutía necesidad de transformarse, convertirse en una universidad moderna, con una diversificación en su oferta educativa, además de impulsora de la cultura.
En ese entonces, la Casa de Hidalgo se asumía como socialista, al tiempo que vivía permanentemente dominada por el espíritu liberal. El historiador consideró que lo que imperaba en el pensamiento de Arnaldo Córdova en ese entonces era un espíritu nacionalista, con las raíces libertarias y pensamiento de Vasco de Quiroga, Hidalgo, Morelos y Ocampo.
Bajo la tutela de Natalio Vázquez Pallares, Arnaldo Córdova se transformó en un conocedor de la Historia de México, uno de los pocos mexicanos marxistas bien formados -consideró el ex rector nicolaita- que con su ejemplo enseñó que la Historia es la memoria del pasado en el presente y el análisis de los hechos pasados, consiste en hacer del pasado mismo, un problema del presente.
Jaime Hernández recordó cómo por cuestiones políticas su paso como catedrático en la UMSNH fue de sólo un año; sin embargo, años después y con el cambio del ambiente político del país retornó a su Alma Mater a impartir cursos y conferencias en la Facultad de Historia.
Luego de agradecer la semblanza detallada que Jaime Hernández hizo del maestro Arnaldo Córdova, el rector de la Casa de Hidalgo, Medardo Serna González se refirió al homenajeado como uno de las grandes nicolaitas contempoaráneos, quien externó en alguna reunión en donde él estuvo presente que el país necesita buenos gobiernos, sin importar si su ideología es de izquierda o derecha, “gobiernos que respeten las libertades, las leyes , la opinión ajena y que estén acotados en el ejercicio del poder político”, opinión que le impactó, reconoció el rector nicolaita.
Arnaldo como intelectual fue un innovador, -prosiguió Serna González- decía que era jurista y politólogo, muchos más lo consideraron tambien un historiador. La innovación en él se tradujo en ser un académico que se atrevió a construir una escuela ideológica interdisciplinaria que perduró y se fortaleció en toda una generación, probó nuevos esquemas para caminar hacia un régimen democrático, lo cual tiene una gran valía para la sociedad mexicana, dijo.
Medardo Serna afirmó que la democracia es un proceso que existe diariamente y se fortalece a través del trabajo de todos los ciudadanos, lo cual ilmplica un gran reto para la generación actual de mexicanos.
Luego de la lectura del reconocimiento que la Casa de Hidalgo hace a Arnaldo Córdova en el año del Centenario de la Institución, por sus aportaciones a la teoría política e historica, así como su contribución a un Estado democrático, Medaredo Serna entregó el documento a su hijo, Lorenzo Córdova Vianello.
Entender las elecciones del 2018 como un juego del “todo o nada”, sería traicionar la mejora que la generación ideológica democrática de Arnaldo Córdova, que en ocasiones con el sacrificio de vidas humanas se construyó en México, afirmó su hijo, al agradecer la distinción recibida.
Reconoció en su padre a un distinguido nicolaita, cuyo corazón siempre se remontó a su Alma Mater, a la cual perteneció en momentos difíciles para la historia del país, como los que se vislumbran hoy en México ante un escenario de falta de credibilidad en la democracia.
Pero sería un grave error, -destacó- el olvidar a una generación que trabajó desde 1980 por construir un país con nuevos horizontes de democracia y libertad ideológica. En los tiempos actuales de convulsión social y desencanto porque las alternativas de gobierno que llegaron al poder a través del sistema democrático no resultaron lo que los votantes esperaban, marcan el reto de analizar cómo somos y cuál será la mejor vía para enfrentar el futuro, lo cual sin una mirada de reconocimiento hacia el pasado, podría resultar en un cierre de ruta, afirmó.
Por tanto, reivindicar los valores democráticos a través de una ruta pacífica que permita resolver controversias, es la mejor contribución que puede hacerse a la memoria de Arnaldo Córdova, concluyó el secretario presidente del INE.
Acompañaron esta ceremonia llevada a cabo en patio central de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, el director de la misma, Héctor Chávez Gutiérrez; y el coordinador de la comisión para los festejos del Centenario de la Casa de Hidalgo, Héctor Pérez Pintor.
Posteriormente, se llevó a cabo una mesa de reflexión académica titulada: “Vida y obra de Arnaldo Córdova”, en la cual participó el investigador de la División de Humanidades y Ciencias Sociales del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey-CDMX; José Florencio Fernández Santillán.
